146الَّذينَ آتَيناهُمُ الكِتابَ يَعرِفونَهُ كَما يَعرِفونَ أَبناءَهُم ۖ وَإِنَّ فَريقًا مِنهُم لَيَكتُمونَ الحَقَّ وَهُم يَعلَمونَ Aquellos a quienes dimos la Escritura [Sagrada], le conocen1 como conocen a sus hijos y, ciertamente, un grupo de ellos esconde la Verdad a sabiendas de lo que hacen.Se refiere al Mensajero del Islam. En sus Escrituras Sagradas, los sabios de los judíos y los cristianos habían leído su nombre y las señales que anunciarían su condición profética. Fajr al-Razi, Tafsir al-Kabir, t. 4, p. 128.