¡Oh, los que creéis! Quien de vosotros reniegue de sus creencias religiosas [sepa que] vendrá Dios con una gente a la que Él ama y por la que es amado, [que será] humilde con los creyentes y severa con los que ocultan la Verdad. Esforzados por la causa de Dios y que no temen la maldición de ningún calumniador. Este es el favor de Dios, que otorga a quien Él quiere. Y Dios todo lo abarca, todo lo conoce.