No es voluntad de Dios [Oh vosotros que negáis la verdad] abandonar a los creyentes a vuestra forma de vida: [y] por eso ha de separar a los malvados de los buenos. Y no es voluntad de Dios desvelaros lo que está fuera del alcance de la percepción humana: sino que [para eso] elige Dios de entre Sus enviados a quien Él quiere. Creed, pues, en Dios y en Sus enviados; porque si creéis en Dios y sois conscientes de Él, os aguarda una magnífica recompensa.