Replicó: “¡Oh pueblo mío! ¿Qué os parece? ¿Si [es verdad que] me apoyo en una prueba clara venida de mi Sustentador, que me ha concedido de Sí una gracia --[si esto es verdad, ] quién podría protegerme de Dios si me rebelara contra Él? ¡Por eso, lo que me ofrecéis es sólo la perdición!”