3وَأَنَّهُ تَعالىٰ جَدُّ رَبِّنا مَا اتَّخَذَ صاحِبَةً وَلا وَلَدًا pues [sabemos] cuán excelsa es la majestad de nuestro Sustentador: ¡jamás ha tomado consorte ni hijo!