«Inventaríamos una mentira sobre Dios si regresásemos a vuestras creencias después de habernos Dios salvado de ellas. No nos es posible regresar a ellas a menos que Dios, nuestro Señor, lo quiera. El conocimiento de nuestro Señor abarca todas las cosas. Hemos depositado nuestra confianza en Dios.» «¡Oh, Señor! ¡Juzga con justicia entre nosotros y nuestro pueblo! ¡Tú eres el mejor de los jueces!»