¿Y quien puede ser más perverso que quienes atribuyen a Dios sus propias invenciones o desmienten Sus mensajes? Esos tendrán [en vida] lo que se les haya adjudicado en el decreto --hasta que les lleguen Nuestros emisarios y les hagan morir, [y] dirán: “¿Donde están ahora esos seres a quienes solíais invocar en vez de Dios?”Y responderán: “¡Nos han abandonado!” --y darán testimonio contra sí mismos de que, ciertamente, rechazaron la verdad.