Di: «¡Oh, gentes! Soy, en verdad, el Mensajero de Dios para todos vosotros. De Aquél a Quien pertenecen los cielos y la Tierra. No hay otro dios más que Él. Da la vida y da la muerte.» Así pues, creed en Dios y en Su Mensajero, el profeta iletrado, que cree en Dios y en Sus palabras. Seguidle para que así seáis bien guiados.