Y [asimismo,] aceptamos un solemne compromiso de quienes dicen: “Ciertamente, somos cristianos”: y ellos, también, han olvidado mucho de lo que se les dijo que tuvieran presente --y, por eso, hicimos que surgieran entre ellos la enemistad y el odio, [que perdurarán] hasta el Día de la Resurrección: y en su momento Dios les expondrá sus manejos.