¡OH VOSOTROS que habéis llegado a creer! No os burléis unos de otros: puede que esos [de quienes se burlan] sean mejores que ellos; ni las mujeres unas de otras: puede que esas [de quienes se burlan] sean mejores que ellas. Y no os difaméis unos a otros, ni os insultéis con motes [ofensivos]; mala es toda imputación de iniquidad después de [haber alcanzado] la fe; y los que [siendo culpables de ello] no se arrepientan –¡ésos, precisamente, son los malhechores!