Encontraréis a otros que quieren estar a salvo de vosotros y a salvo de su gente; cada vez que vuelven a la discordia, caen más profundamente en ella. Pero si no os dejan y os ofrecen la paz y detienen sus manos... Atrapadlos y matadlos dondequiera que los encontréis. Os hemos dado sobre ellos una autoridad evidente.