LOS QUE SIGUEN el Antiguo Testamento --te piden [Oh Profeta] que hagas descender del cielo una revelación para ellos. Cosas más graves pidieron ya a Moisés, cuando dijeron: “¡Haz que veamos a Dios cara a cara!” --y entonces les fulminó el rayo del castigo por esta maldad suya. Luego se entregaron a la adoración del becerro [de oro] --y eso después de haber recibido pruebas claras de la verdad. Aún así, les perdonamos esa [falta suya] y dimos a Moisés una prueba clara [de la verdad],