PUES [así es:] cuando la desgracia aflige al hombre, invoca Nuestra ayuda; pero cuando le concedemos un favor de Nuestra gracia, dice [para sí]: “¡Esto me ha sido dado gracias a la sabiduría [que poseo]!”¡No, esta [concesión de gracia] es una prueba: pero la mayoría no lo entienden!