161وَما كانَ لِنَبِيٍّ أَن يَغُلَّ ۚ وَمَن يَغلُل يَأتِ بِما غَلَّ يَومَ القِيامَةِ ۚ ثُمَّ تُوَفّىٰ كُلُّ نَفسٍ ما كَسَبَت وَهُم لا يُظلَمونَ Un profeta no puede cometer fraude. Quien defraude se presentará el Día del Levantamiento cargando con lo que defraudó; luego a cada uno se le pagará cumplidamente lo que se haya ganado y no serán tratados injustamente.