y [te hemos enviado] no fueran a decir [en el Día del Juicio], cuando les sobrevenga la desgracia como consecuencia de lo que han obrado sus manos: "¡Oh Sustentador nuestro, si tan sólo nos hubieras mandado un enviado, hubiéramos seguido Tus mensajes, y hubiéramos sido de los creyentes!"