10وَأَلقِ عَصاكَ ۚ فَلَمّا رَآها تَهتَزُّ كَأَنَّها جانٌّ وَلّىٰ مُدبِرًا وَلَم يُعَقِّب ۚ يا موسىٰ لا تَخَف إِنّي لا يَخافُ لَدَيَّ المُرسَلونَ Tira tu vara. Y cuando la vió reptar como si fuera una serpiente se alejó dando la espalda sin volverse. ¡Musa! No temas, los enviados no temen ante Mí.