Y con la voluntad de Dios, les debelaron: David mató a Yalut, y Dios le otorgó el poder y la sabiduría, y le enseñó cuanto le plugo. Si Dios no hubiera contenido el impulso del hombre; el uno por el otro, la tierra se habría corrompido; pero, Dios es graciable para con la humanidad.