Así pues, cuando habiendo divorciado a vuestras mujeres, se acerque el fin de su período de espera, o bien las retenéis en forma honorable o las dejáis ir de buenas maneras. Pero no las retengáis contra su voluntad por hacer[-les] daño: pues quien tal hace falta contra sí mismo.Y no toméis [estos] mensajes de Dios con frivolidad; y recordad los favores con que Dios os ha bendecido y toda la revelación y la sabiduría que ha hecho descender para vosotros a fin de amonestaros con ello; y manteneos conscientes de Dios y sabed que Dios tiene pleno conocimiento de todo.