¡OH VOSOTROS que habéis llegado a creer! Se os ha prescrito la justa retribución para los [culpables en] casos de homicidio: el libre como libre, el esclavo como esclavo y la mujer como mujer. Y si le es perdonada al culpable una parte [de su culpa] por su hermano, esta [remisión] deberá cumplirse en forma honorable y la restitución a su prójimo se hará de buenas maneras. Esto es un alivio de vuestro Sustentador y una misericordia. Y a aquel que, a pesar de ello, exceda intencionalmente los límites de los correcto, le aguarda un castigo doloroso: