POR cierto que, las colinas de Assafa y Almarua se euentan entre los ritos de Dios; por lo tanto quien peregrine a la Casa (La Meca) o visite dichas colinas no cometerá pecado alguno en rodearlas procesionalmente. Pero, quien haga el bien espontáneamente, sepa que Dios es retribuyente, sapientísimo.