30قالَ إِنّي عَبدُ اللَّهِ آتانِيَ الكِتابَ وَجَعَلَني نَبِيًّا [El niño] dijo: “En verdad, soy un siervo de Dios. Él me ha entregado la revelación y ha hecho de mí un profeta,