Y DIOS [os] propone una parábola: [Imaginad] una ciudad [antaño] segura y tranquila, cuyo sustento le llegaba en abundancia de todas partes, y que luego rehusó blasfemamente ser agradecida por las bendiciones de Dios: y entonces Dios hizo que se viera envuelta por la miseria del hambre y el miedo a causa de todo [el mal] que su gente había obrado persistentemente.