A Él regresaréis todos. La promesa de Dios es verdadera. Él inicia la Creación y luego la hace regresar (a Él) para recompensar con equidad a quienes creyeron y obraron rectamente. Y aquellos que no creyeron tendrán una bebida de agua hirviente y un castigo doloroso por haber ocultado la Verdad.